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Para ser buena mamá, necesitas autocompasión

¿Realmente existe alguna base clara para ser buena mamá? Empecemos por los tres elementos de la AUTOCOMPASIÓN.

¿Realmente existe alguna base clara para ser buena mamá? Empecemos por los tres elementos de la AUTOCOMPASIÓN: Respetarte y no tratarte con criticas, sentir que formas parte de la humanidad y aún más de un grupo enorme llamado: “MAMÁS”, conectarte con el aquí y ahora mediante Mindfulness.

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¿Y porqué es tan necesaria esta maravillosa herramienta para que construir una crianza respetuosa y ser buena mamá?

La mayoría de las mujeres y de las madres llegan a estar rebasadas por el estrés y lo peor, por la autocrítica constante sobre su labor como madres.

Porque criar a un hijo es una tarea compleja, un niño, sobre todo en los primeros 5 años de vida resulta un ser que está en formación que necesita que mamá esté realmente atenta a lo que la crianza necesita.

¡No hay que malinterpretar! No se trata de darle todo a manos llenas y no poner límites, no es que el niño se vuelva en un pequeño tirano y que alrededor de él gire TODO.

Leer las emociones de un niño, el llanto, enojo, alegría, deseo de ser cargado siempre será un reto, por eso abre el canal de la comunicación, la confianza, el respeto; o sea que se construya un apego seguro,



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Regálale a tú hijo el amor que necesita; no cosas, no un teléfono inteligente, no muchos juguetes, si no AMOR REAL. 

Entonces, ser buena mamá puede ser complejo de definir, pero sí se basa en abrazar a tu hijo cuando lo necesita, consolarlo después de una pesadilla, ponerle límites cuando quiere retarte, que exista JERARQUÍA, que lo haga sentir que hay adultos que saben que es lo correcto e incorrecto.

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Ser buena mamá si tú no tuviste una buena crianza

Pero, muchas mamás no tuvieron ese estilo de relación en su infancia; tal vez pudiste ser maltratada, abusada, poco comprendida o muy criticada y eso provoca que no sanen heridas  y serán notorias en la maternidad.

Entonces puedes presentar depresión durante el embarazo o depresión posparto que hará que el vínculo con tu hijo se vuelva complicado: si llora pensarás que lo hace porque está haciendo berrinche.

Te resultará difícil entender las señales de tu bebé, si nadie lo hizo por ti. Puedes sentir miedo al abandono, rechazo y ser muy crítica hacia ti misma porque no recibiste los cuidados de tus padres.

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Esta forma dolorosa de relación puede ser transformada gracias a un trabajo interno guiado por la psicoterapia y claro, las relaciones enriquecedoras  pueden apoyarte a desarrollar un apego seguro.

Sin embargo, no todo el tiempo está a tu lado tu terapeuta, ni amigos, por eso te necesitas a ti: ofrecerte amor, cariño y autocompasión. Si te sientes merecedora de amor, eso es lo que puedes enseñarle a tu hijo.

Por qué el Mindfulness ayuda a ser una buena mamá

El saber que lo que sientes no es ajeno a las otras madres, que no estás sola, te permite consolarte por que entiendes que tu labor no es fácil y que tu hijo realmente te preocupa.

Por último si aprendes sobre Mindfulness estarás con una atención plena en el aquí y en el ahora, lo que te permite calmarte y concentrarte en lo que sientes pero sin juzgarte o criticarte.

Entonces mami, ¿qué te parece si comienzas a aplicar estas herramientas?, poco a poco te sentirás mejor y sobre todo recuerda que si hay heridas  puedes sanarlas, pero necesitas ayuda y te necesitas a ti.

Rompe el círculo de formar lazos con dolor, culpa y tristeza y entra en el del amor, la confianza y el respeto.

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