- Disminuye el ritmo cardiaco y la presión arterial de las personas que conviven con una mascota como parte de la familia.
- Al tener un perro con necesidad de actividad física, ayuda a mejorar la calidad de vida de ambos.
Te interesa: Qué hacer si tu mascota no acepta al bebé - La convivencia con un animal genera tranquilidad en las personas, al grado que muchos son parte complementaria de terapias en pacientes terminales, discapacidades y algunas enfermedades.
- Tienen mayor nivel de responsabilidad y compromiso. Al tratar con animales, se involucran mejor en el trabajo grupal y conviven de forma armónica en la escuela.
- Se desarrolla el sentido humanitario en los niños, enseñándoles que un ser vivo siente y piensa (no de la misma manera que los humanos, pero lo hacen).
- El sistema inmune se fortaleces, ya que el niño se encuentra expuesto a mayor cantidad de antígenos a temprana edad.
- Las familias que conviven con animales están más conscientes de su entorno, respetando y valorando más a los seres vivos, lo que se traduce como personas íntegras, honestas, y con una inclusión exitosa en la sociedad.
Niños y perros: tips para que se lleven bien
Está comprobado científicamente que tener un animal de compañía trae beneficios físicos y mentales.
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