Los niños de distintas edades no logran entender términos médicos y, principalmente, pueden tener preguntas muy catastróficas o fatalistas respecto a la muerte.
Explicarle una enfermedad terminal a un niño de 5 años requiere paciencia, empatía y sensibilidad. Lo más importante es que se sienta un ambiente seguro y de apoyo para que el niño exprese sus sentimientos y haga preguntas.
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Cómo explicar una enfermedad terminal a niños
Según informa la American Cancer Society, después de los 5 años, los niños están mejor preparados para entender el concepto de la muerte, el hecho de que es algo para siempre.
Estos son algunos tips que da la American Cancer Society respecto a hablar de enfermedades terminales, como el cáncer o la muerte de algún familiar.
Es clave que los niños estén al tanto de cosas claras sobre el enfermedad y tratamiento de mamá, papá o el familiar, todo a su nivel de entendimiento. Puede que esta información requiera repetirse en más de una ocasión. Es importante usar frases como «quieren preguntar algo» o «qué entendiste».
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- Responder a todas las preguntas con honestidad, incluso cuando hagan una pregunta como «¿papá o mamá se van a morir?
- Este es el momento clave para enseñar a los niños a identificar y nombrar sus sentimientos, a expresarlos.
- Hablen del enojo y la frustración, porque eso es lo principal que sentirán cuando papá o mamá no estén.
- Expliquen cómo se siente la ansiedad; hacer ejercicios para reducir la ansiedad y aprender a respirar en consciencia.
- Es importante explicar a los niños si el momento de la muerte está cerca. Esto, por más cruel que suene, ayuda a que los niños pasen más tiempo entre cada visita. El solo hecho de que el niño pueda tocar a su mamá o papá. puede representar mucho para ellos.
- Explicar una enfermedad terminal a niños es clave para que se pueda procesar el sentimiento; por eso es importante verbalizar que es normal tener estos sentimientos fuertes y que es bueno poder expresarlos.
- Reafirmen que, a pesar de que la situación es difícil para todos, los niños deben saber que NO es su culpa
- Intenten mantener las rutinas, al menos para que los niños no se centren en un problema, si no que jueguen, pasen el tiempo con actividades que les ayuden a relajarse.
- Usen la creatividad, como un juego de palabras para entender cómo cambia la vida, aligerar conceptos complejos mediante algún cuento. Incluso, pueden usare libros, dibujos o juegos de roles apropiados para su edad para ayudar a explicar la enfermedad.
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Si el niño muestra un nivel grave de ansiedad, teme ir a la escuela, se culpa a sí mismo o está desanimado o con poca autoestima, busquen a algún tanatólogo.
Los niños dentro de este rango de edades buscan reafirmación por parte de sus padres e incluso sentirse más apoyados y queridos.