Con el afán de perder peso, muchas mujeres se restringen en extremo, arriesgan su bienestar y en consecuencia la calidad de su leche, sin embargo, el secreto está en amamantar y reducir la ingestión de grasas y azúcar. Por ello, las dietas volumétricas son una excelente alternativa.
En qué consisten
Se centran en conseguir una mayor saciedad con pocas calorías y gran volumen, o sea que comes más y bajas de peso.
 Están basadas en un concepto llamado densidad energética, es decir, en la cantidad de calorías por cada gramo. Si quieres probarlas, asegúrate de incluir:
1. Agua simple
 Es vital para mejorar la producción de leche. Bebe un vaso antes y después de cada comida y colaciones.
2. Hojas verdes
 Contienen vitaminas A y E, y fibra. Consume 2 tazas al día.
 
 
                 
 
            
        
3. Salmón
 Incluyen grasas esenciales Omega 3. Come 100 gramos una o dos veces por semana.
4. Fruta de temporada
 Elígela en trozos en lugar de en jugos. Disfruta 2 a 3 tazas diarias.
5. Linaza y chía
 Tienen Omega 3 y fibra. Agrega una cucharada al día de cada una.
6. Almendras, ajonjolí, nueces, pistaches.
 Poseen vitaminas, minerales y grasas buenas. Escoge entre 20 almendras, 8 cucharadas de ajonjolí, 6 nueces o 40 pistaches por día.
7. Leguminosas (frijoles, lentejas, habas, garbanzo, soya)
 Contienen hierro y fibra. Se deben combinar con opciones ricas en vitamina C. Come ½ taza al día.
De la teoría a la práctica
 Algunos ejemplos de preparaciones son:
Plato fuerte
 – Salmón a la plancha con costra de chía
 – Lentejas y pasta estilo hindú
Ensaladas
 – Verde con manzanas, espinacas, nuez picada y aderezo de miel y mostaza
 – Mexicana: pimiento, lechuga, elote y frijoles. Agrega tiras de tortilla crujiente
Colaciones
 – Hummus (puré de garbanzo y ajonjolí) con galletas integrales habaneras
 – 1 taza de coctel de frutas con queso cottage y linaza
Licuados
 – De avena con manzana y canela
 – Rico en fibra: linaza, chía, ciruela pasa y el jugo de media naranja
Bebidas
 – Leche de almendras con vainilla
Los momentos en los que alimentas a tu bebé son espacios de comunicación y aprendizaje. ¡Éxito!
