Dile adiós a tablets y celulares con estas actividades
Haz un esfuerzo y date tiempo para pasar con tus niños horas o días sin estar pegados a la pantalla, pues esto, además de que los pondrá en contacto con el mundo real, los motivará a moverse, a imaginar y crear, y los ayudará en su proceso de desarrollo y crecimiento y a tener un mejor aprovechamiento escolar.
Por citar algunos ejemplos, la Asociación Española de Pediatría habla del juego (como forma de esparcimiento, con juguetes y/o al aire libre) como «un apoyo educativo que ayuda al niño a progresar en su desarrollo motor y a avanzar en la esfera intelectual y sociabilizadora a través de la comunicación e interrelación con los que le rodean».
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A esto, la UNICEF agrega que el juego ayuda al niño a ampliar sus conocimientos y experiencias y a desarrollar su curiosidad y su confianza. Y es que los pequeños aprenden intentando hacer cosas, comparando los resultados, haciendo preguntas, fijándose nuevas metas y buscando la manera de alcanzarlas, en interacción con el mundo que los rodea y no frente a una pantalla.
¿Cómo hacerlo?, “empleando diversos materiales simples para jugar que se adapten a la etapa de desarrollo en que se encuentren.”
Por otro lado, los estudios más recientes indican que la edad promedio en la que un niño tiene su propio smartphone es a los diez años; sin embargo, desde su primer año ya están en contacto directo con ellos. Evitar el mal uso depende nosotros, los papás, que no debemos prohibirlos, pero sí limitar su uso y vigilar lo que ven.
Te sacamos de dudas: ¿A qué edad los niños pueden tener celular?
¿Listos para dejar por un momento el celular?
Te compartimos algunas sugerencias a las que ningún pequeñito podrá resistirse. Esperamos que tú, tampoco.
• Armen rompecabezas. Ésta es una actividad muy completa, pues el niño desarrolla su motricidad fina, ejercita la observación, comparación y memoria, mantiene su concentración y atención, analiza y arma estrategias, además de que fortalece el vínculo familiar y trabajo en equipo.
• Hagan finger paint. Pintar con huellas convertirá a tu hijo en todo un artista. Deja que eche a volar su imaginación y, con las obras creadas, decora su habitación, hagan tarjetas y papel para forrar regalos y cuadernos. Busca tintas de colores brillantes.
• Jueguen al avioncito. El clásico que todos jugamos cuando éramos niños y que ya muy pocos pequeños conocen en estos tiempos. En el patio o en la banqueta, usen gises de colores. Con este juego, los chicos se pondrán en movimiento, además de hacer un repaso de los números.
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• Busquen unas tijeras y pónganse a recortar. Esta actividad requiere una gran coordinación entre el cerebro y la mano del niño. La motricidad fina se verá potenciada y tu hijo se sentirá muy acompañado en el proceso si estás con él.
• ¿Qué tal caras y gestos? Pongan en práctica su habilidad para comunicarse sin hablar e interpretar los estados de ánimo. Éste es un buen ejercicio de expresión de emociones y de dramatización y recreación de personajes.
• Enséñales rondas infantiles clásicas. Los juegos mexicanos tradicionales son un pretexto perfecto para reunir a sus amiguitos y hacer actividades grupales. El baile y el canto serán los invitados estrella. Otra opción es involucrar al resto de la familia.
• Salgan en bici o patines. ¿Tus chicos ya dominan estas actividades? Si no, aprovecha la oportunidad para que las aprendan. Si ya las saben hacer, conviértelas en algo cotidiano, con miras a que se vuelvan un hábito deportivo.
• Consideren las mil y un posibilidades de los bloques. Dejar las tablets y celulares va a ser posible si exploran su entorno.
Todos los chicos adoran armar y construir ambientes, edificios, medios de transporte, animales, personajes y todo lo que se les ocurra. Ejercita la motricidad fina y pasen el tiempo de la forma más creativa.
• Lean cuentos. Fomentar la lectura y fortalecer su imaginación son dos regalos para toda la vida que se otorga a los niños en sus primeros años de vida. Háganlo no sólo antes de dormir, si no a cualquier hora del día.
• Váyanse de picnic. Si tienen un gran parque o un bosque cercano, no pierdan la oportunidad de salir y disfrutar la naturaleza con un picnic divertido. Lleva comida saludable, así también estarás fomentando buenos hábitos alimenticios.