Crédito: STOCK
Es válido que en algunas temporadas los niños se vean más interesados en los dulces y en realidad no se trata de quitarle todo, pero sí saber algunas estrategias para lograr que un niño coma menos dulces y si lo hacen responsablemente, evitarás conflictos y además cuidarás su salud.Así es como lograrás que un niño coma menos dulces:
- Prepáralo. Si van a ir a casa de los abuelos y sabes que lo recibirán con una caja de chocolates, planea una comida completa y nutritiva que tenga fibra. Si se siente satisfecho, tal vez coma menos dulces.
- Establece límites y sé firme. Si suele excederse con los postres, dile con anticipación cuántos podrá comer.
- Predica con el ejemplo. La eficacia de las conductas positivas radica en que te vea haciéndolas; procura no devorar las galletas delante de él y si te cacha, ofrécele una y muéstrale cómo las vas a guardar. Siguiendo tu ejemplo comerá menos dulces.
- Háblale de los daños. A su edad difícilmente le interesan los padecimientos relacionados con la obesidad, mejor explícale que puede enfermarse si no se mide; intenta frases como “Si te acabas la bolsa de gomitas te puede doler el estómago y te quedarías sin salir a jugar”.
- Cámbiaselos por otros beneficios. Sobre todo si tiene sobrepeso, las medidas deben ser más sustanciales; por ejemplo, proponle intercambiárselos por otro privilegio como usar más tiempo su videojuego o elegir la película que verán.
- “Ojo por ojo”. Un alimento saludable por cada dulce, por ejemplo una manzana, una ración de verduras, etc., al cabo de unos días perderá el interés en la dinámica y la olvidará
- Invítalo a compartirlos. En la Navidad, nada cómo mostrarle la importancia de compartir y enfatizarle cuán felices hará a sus amigos con ello.
- Apóyate en la familia. A pesar de que algunos sean muy consentidores, si les resaltas las razones y los beneficios de cuidar su salud, es más probable que participen.
- Contribuye a la causa. Si vas a recibir niños en tu casa, opta por ofrecerles estampas, juguetes sencillos, tatuajes temporales o cualquier objeto libre de azúcar; si tienen antojo de algo ligero, prepara palomitas naturales o jícamas con limón. Eso hará que coman menos dulces porque se sentirán satisfechos.
- ¡No seas tan estricta! Todo el año has cuidado la alimentación de tu familia, ser indulgente uno o dos días ¡no le hará mal! Recuerda que en la infancia adquirimos algunas de las memorias más satisfactorias de nuestras vidas y parte de ellas es permitirnos un poco de diversión.
Cómo cuidar los dientes de los niños en Halloween
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
