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Qué es la Atención Positiva en la crianza y por qué es importante

Mucho se escucha de la crianza positiva, pero queremos explicarte qué es la Atención Positiva y la importancia para su infancia.

atencion positiva en la infancia

Crédito: atencion positiva en la infancia

Mucho se habla de la crianza positiva y de ser asertivos con los hijos pero, ¿qué pasa con cómo se comunican los papás? Aquí les explicamos qué es la Atención Positiva en la crianza y por qué es clave para los niños.

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Qué es la Atención Positiva

Según Christine Raches, profesora Asistente de Pediatría Clínica de la Universidad de Indiana, se puede definir la Atención Positiva como algo tan sencillo como responder a los demás de una manera que demuestre calidez e interés y con actos que transmitan un mensaje de confianza y seguridad.

Entonces, se logra una Atención Positiva a través de sonrisas, contacto visual, contacto físico poco invasivo, el uso de palabras amables y de afirmación; celebrar y animar a los niños y mostrando interés en los intereses, actividades y logros de los críos.

Actos que parecen tan simples, pueden mejorar la crianza y según la web australiana Raising Children lograr esto con los niños hará que se sientan más seguros y amados, incluso les ayudará a lidiar mejor con la frustración o enojo.



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La importancia durante la infancia

Expertos en crianza señalan que los principales beneficios de la Atención Positiva es que los niños presentan menos tendencia a comportamientos negativos, aislados e incluso agresivos. Incluso, es claro cómo los niños que crecen con este tipo te atención suelen tener mayor recepción a actitudes positivas que a las negativas.

Mientras que los niños que carecen de ella o de vínculos, harán cualquier cosa negativa porque entenderán que así consiguen la Atención de sus padres. Sin embargo, al ser niños, no entienden que papá y mamá percibirán que su hijo es «mal portado» cuando en realidad sólo necesita atención.

Una Atención Positiva en la infancia ayuda a reforzar la imagen que tienen los niños respecto a sus padres y con el tiempo van acumulando más mensajes positivos, asertivos y amorosos que aquellos momentos de gritos. Esto hará que tengan mejor panorama de cómo se relacionan en la vida adulta.

Atención positiva según la edad de tu crío

La misma web australiana Raising Children explica cómo mantener esta actitud durante los primeros años de los niños, dependiendo la edad y resaltando la importancia para cada momento.

Recién nacidos a 2 años:

  • El contacto para los niños es clave y brinda seguridad y confianza. Por eso, intenta siempre sonreírle a tu hijo y más si te observa y te sonríe. A penas te está conociendo y necesita contacto visual contigo.
  • Sí o sí, consuela a tu hijo cuando llore desconsoladamente, es la mejor forma de tranquilizarlo.
  • Si tu bebé empieza a balbucear, intenta acercarte y responder a ellos, como si fuera una plática
  • Observa lo que le interesa a su bebé y siempre alienta para que explore, pero escuchando tu voz, eso ayudará a que sienta confianza.
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Toddlers: 

  • Para la Atención Positiva se requieren momento únicos, pero simples. Eso les enseñará a encontrar asombro en pequeñas cosas del día a día.
  • Cuando tengan conversaciones con los niños, esperen un momento para que él pueda razonar lo que le dijeron y así pueda desarrollar una respuesta. Esto le ayudará a la escucha activa. 
  • Cuando jueguen, también platiquen sobre lo que están haciendo, intenta no corregir, ignorar o pedir que lo haga más rápido.
  • Dile a tu crío hijo exactamente lo que te gusta de lo que está haciendo. Por ejemplo,»Me encanta cuando ayudas a guardar los juguetes».
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Hasta 5 años: 

  • Realicen actividades en familia o al menos con mamá o papá. De preferencia elijan los juegos favoritos de los niños.
  • Intenten mantener rutinas matutinas y nocturnas en las que complementen con contacto visual y sonrisas honestas. A esta edad, los niños ya tienen más entendimiento de rechazo.
  • Cuando veas a tu crío después de la escuela o de tu día de trabajo, intenta mostrar afecto físico e incluso usa frases como «me da gusto verte» «qué bueno que ya estamos juntos» «me alegra que ahora podamos compartir».

Cuando los niños son pequeños, o al menos hasta los 7 o 10 años, los sentimientos de seguridad y protección provienen de la relación que tengan con sus padres. Por tanto, actos tan sencillos como sonreírles, hacer contacto visual o usar palabras de afirmación ayudarán a darle paz cuando está asustado o inseguro, también percibirá confianza mientras crece. 

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