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Montessori en casa: 4 tips clave para lograrlo y sin gastar una fortuna

Antes de que creas que debes gastar una fortuna en ajustar tu hogar, te decimos cómo llevar el método Montessori en casa de forma fácil.

metodo montessori en casa

Crédito: casa con estilo montessori

¿Alguna vez has escuchado sobre preparar ambientes Montessori en casa? Seguramente se cree que es muy costoso y complicado pero ¡No te preocupes!

La metodología Montessori es tan versátil que puede convertirse en una filosofía de vida aplicable en tu día a día.

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Lo primero que tienes que entender es que los niños mantienen, a diferencia de un adulto, un ambiente distinto. Los adultos admiramos el ambiente y pueden recordarlo, pero los niños lo absorben.

Esto quiere decir que ellos no necesariamente recuerdan las cosas que ven; esas cosas pasan a formar parte de su psique.



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Método Montessori en casa

Los ambientes preparados son una parte fundamental del método Montessori, ya que son espacios cuidadosamente diseñados para fomentar la independencia, la exploración y el aprendizaje autónomo en los niños.

Llevar el método Montessori en casa tienen una gran importancia porque ayuda a que los niños perciban un ambiente seguro, cómodo y adecuado para desarrollarse y aprender de manera autónoma.

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Los ambientes preparados deben ser:

  • Reales (integrados a la vida práctica): incluyen tareas como barrer, limpiar, poner la mesa, aseo personal y vestirse.
  • Estéticos: se refieren al acomodo de los juguetes y materiales para trabajar la motricidad fina y gruesa. Por lo general, son de madera para evitar la sobreestimulación.
  • Ordenados: una de las reglas de oro en el método Montessori es que los juguetes tengan un lugar específico y que siempre los regresen al mismo lugar cuando no se les estén usando.
  • Simples: entre más sencillo sea el juguete o material, mejor. La idea es que los niños pongan a funcionar el juguete y no que el juguete haga todo.

Algunos ejemplos de cómo se diseñan los ambientes de método Montessori en casa son:

1. Mobiliario a su medida: Los muebles en los ambientes Montessori están diseñados a la medida de los niños, para que puedan alcanzar fácilmente los materiales y trabajar de manera cómoda y ergonómica. Por ejemplo, las mesas y sillas son de diferentes alturas para adaptarse a las diferentes edades y tamaños de los niños.

En casa, podemos proporcionar muebles que estén a su alcance, como una torre de aprendizaje que ayuda a que los niños puedan ir más arriba sin tanto riesgo y bajar fácilmente  o realizar tareas como cepillarse, lavarse las manos, escoger su ropa o servirse agua por sí solos.

También puede ser útil una mesa sensorial que cubra varias necesidades, como trabajo de manualidades, comer o tareas.

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2. Colchón o cama baja: Es una herramienta simple y mucho menos costosa que una cuna. La mayoría de las familias usan cunas, pero con esta opción, los niños pueden tener más libertad para explorar su entorno de manera segura.

Los colchones al piso son una gran opción desde los 8 meses de edad y luego pueden pasar a una cama Montessori (cama baja).

3. Ambientes ordenados: En los ambientes Montessori, todo tiene un lugar específico y está organizado de manera lógica y accesible. De esta manera, los niños pueden encontrar y utilizar los materiales de aprendizaje de manera autónoma, y se les enseña a ser responsables de mantener el ambiente limpio y ordenado.

En casa, las rutinas pueden ser una manera de aplicar orden en sus mentes y seguridad en su entorno. Por ejemplo, la hora de bañarse, cenar, cepillarse y la hora de ir a dormir son momentos que pueden ser organizados y enseñados a los niños para que puedan seguirlos de manera autónoma.

4. Todo por elección, nada por imposición: La importancia de cambiar la manera en que miramos a los niños nos invita a considerarles seres capaces, profundos, sensibles, con un enorme potencial que los adultos debemos respetar.

La libertad y la autodisciplina hacen posible que cada niño encuentre actividades que den respuesta a sus necesidades evolutivas. El método Montessori en casa ofrece a los niños oportunidades para comprometerse en un trabajo interesante, elegido libremente, que propicia prolongados periodos de concentración que no deben ser interrumpidos.

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Recuerden que no necesitan hacer grandes inversiones para aplicar esta metodología en casa y hacerla parte de tu vida familiar.

Lo más importante es tomar consciencia del espacio que brindas a tus hijos y cómo puedes adaptarlo para brindarles seguridad y confianza en su proceso de aprendizaje.

¡Anímate a probarlo y verás cómo tu hogar se convierte en un ambiente de crecimiento y desarrollo para toda la familia!

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