¿Qué es la salud mental materna?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 10% de las mujeres embarazadas y el 13% de las mujeres que han dado a luz en los últimos años experimentan un trastorno mental, principalmente depresión.
En los países en desarrollo, estas tasas son aún más altas, alcanzando el 15.6% durante el embarazo y el 19.8% después del parto. La gravedad de los trastornos mentales maternos puede provocar un sufrimiento e impedimento significativos, potencialmente afectando el crecimiento y desarrollo de los niños, ¿pero qué los provoca? principalmente la presión laboral y la carga de todo lo que representa ser mamá.
En 2022, el Club de Malasmadres y la asociación Yo No Renuncio hicieron públicos los resultados de su encuesta El coste de la conciliación, que mide, por primera vez, el peso del reparto de los cuidados en la crianza en tres términos: económicos, emocionales y personales.
La conclusión principal fue aterradora y tiene que ver con que muchas mujeres, no sólo en España, tienen pérdidas salariales o hasta laborales, por no poder llegar a todo y tener que elegir cuidar de su salud mental.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
57% de las mujeres españolas -o lo que es lo mismo, una de cada dos- ha sufrido una pérdida salarial al convertirse en madre, tras verse obligada a reducir la jornada, pedir una licencia o directamente dejar el empleo
Las mujeres tienen trabajo de oficina y trabajo en casa
La doble jornada laboral y después pasar a todos los deberes de una casa y lo que implica la crianza, tiene un coste emocional y personal para las madres.
De hecho, en la encuesta de Yo No Renuncio se dio a conocer que el 64% declara que llega cansada todos los días a su trabajo.
Desde la Asociación Yo No Renuncio aclaran que el trabajo de los cuidados no remunerados comprende todas aquellas actividades para atender a otros, ya sean tareas físicas o emocionales.
View this post on Instagram
Depresión en la maternidad
Una mujer podría haber vivido depresión posparto pero también otro tipo de depresión o trastorno en su camino como mamá y es algo totalmente solitario; por eso es clave poner atención en la salud mental materna.
Los resultados de las encuestas hechas en España también han servido para concluir que el 66% de las mujeres encuestadas no ha pedido ayuda psicológica, pese a sentirse desbordadas y tristes, mientras que cuatro de cada 10 mujeres se ha sentido minusvalorada en su empleo o en su entorno social tras ser madre.
Lo más grave, según los resultados, es que la sociedad percibe que la crianza no es un trabajo, sino un estado de plenitud y felicidad.
Incluso, si lo pensamos en situaciones que vive cualquier mamá del mundo, la sociedad pensaría que es un «privilegio» tener media jornada laboral, pues seguro «tiene más tiempo libre». Pero la realidad es que una mujer no llega a dormir horas y a descansar o a ir a un spa, llega a limpiar una casa, hacer tareas escolares, bañar niños, cocinar, preparar útiles y claro, poniendo su mejor cara.
Mamás deprimidas ¿realmente tienen apoyo?
Existen ciertos programas de apoyo e incluso existe el Programa Conjunto de UNICEF y la OMS sobre Salud Mental y Bienestar Psicosocial y Desarrollo de Niños y Adolescentes, una iniciativa colaborativa para abordar la salud mental materna y el impacto de los trastornos mentales en el crecimiento y desarrollo de los niños.
El programa enfatiza la importancia de promover el bienestar mental y proporcionar intervenciones efectivas para las madres con trastornos mentales.
Sin embargo, aunque existen esos programas, muchas veces se cree que sólo los necesitan las mujeres con depresión posparto.
Incluso, el estado actual de la salud mental materna a nivel mundial alerta sobre la importancia de reconocer y abordar la depresión posparto como un problema de salud pública crítico.
Los esfuerzos para priorizar la salud mental materna a través del desarrollo de políticas, la intervención temprana y el acceso a la atención médica mental y las redes de apoyo son vitales para promover el bienestar de las madres.
Pero, tal vez el problema real de cómo se cuida la salud mental materna venga directamente de la sociedad y con cómo se ha percibido la crianza conjunta.
Y si no lo pensamos así, cómo es que seis de cada 10 mujeres renuncian a su trayectoria profesional al convertirse en madres, porque todo comienza con la reducción de la jornada laboral.
Tan sólo, un estudio señalaba que la mujer es la principal responsable de las tareas doméstico-familiares, con un 45%, frente al 9% de sus parejas, aunque aporten los mismos ingresos al hogar.