“Los padres son muy importantes para los hijos y nietos, porque dan estructura y fuerza a la familia, son seres que con su ejemplo unen a sus seres queridos y brindan acompañamiento, tranquilidad y, por supuesto, dicha. Por ello, cuando uno o ambos fallecen, los demás miembros de la familia se sienten despojados de su amor y compañía”, indica la tanatóloga Lourdes León.
¿Celebrar o conmemorar la primera Navidad sin mamá?
Recordar con respeto la vida de papá y mamá es conmemorar su ser. Por ello, los expertos en duelos recomiendan que en esa primera Navidad sin mamá o papá, la familia se reúna para conmemorar a sus seres queridos.
No se trata de hacer una fiesta y brindar hasta el siguiente día (celebrar), sino de recordarlos y mantener su energía entre sus seres queridos.
Por ello, se recomienda que sigas estas sugerencias a fin de sobrevivir esta primera Navidad sin mamá.
1. Crea nuevas tradiciones con tu familia:
La Navidad después de la muerte tiene retos que tal vez no todas las personas entenderán.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
Las antiguas tradiciones pueden ser dolorosas de mantener, así que tal vez tu familia inicie con algo nuevo en honor a ellos, como encender una vela especial, reproducir a su artista favorito, acudir a su centro espiritual y solicitar una misa, o preparar una comida que les gustaba.
Esto te permitirá recordarlos con cariño. Toma en cuenta que no todos los familiares querrán participar, así que dales tiempo.
2. Siente tus emociones y las de tu familia:
No te sientas presionado de estar tranquilo todo el tiempo. Si necesitas llorar, recordar o simplemente estar tranquilo, hazlo. Tu y tu familia necesitan tiempo para acomodar las emociones.
Además, aceptar y validar tus y la de tus otros familiares (eso incluye a las infancias) emociones es parte del proceso de sanación. El enojo también es válido, siempre y cuando no se lastime a nadie.
3. Pide ayuda.
Busca compañía en familiares o amigos cercanos que puedan ofrecerte consuelo, un hombro en donde llorar y con quienes puedas compartir recuerdos significativos de tus padres. No enfrentes este momento en soledad si no quieres. Pedir ayuda es de valientes, incluso llorar frente a tus hijos te permitirá sanar.
¿Qué te parece acudir al tanatólogo? Niños y adultos pueden acercarse a estos profesionales de los lutos, duelos y pérdidas.
4. Honra su memoria:
La Navidad después de la muerte no es sencilla y menos con niños pequeños. Dedica un espacio de celebración para ellos. Puede ser un brindis, unos minutos de silencio, una oración, un aplauso o un pequeño altar con fotos y objetos que sean de ellos. Esto puede ayudar a «sentir su presencia» de una manera especial.
5. Ten paciencia con los demás y ¡mucho más contigo!
No te exijas demasiado. Es un momento de duelo, de incertidumbre, de miedo y de mucho dolor. Así que está bien si las cosas no se sienten “normales”, puedes volverte un Grinch y eso está bien, puedes sentirte muy eufórico y querer hacer todo lo que no pudiste con tus padres mientras vivían…
Únicamente date tiempo para adaptarte a esta nueva realidad, nunca olvides que tus padres siempre estarán en tu corazón y en todo lo que te enseñaron.
Libros recomendados para entender la muerte de mamá o papá
- El duelo: crecer en la pérdida
Autores: José González y Manuel Nevado - Aprender de la pérdida: una guía para afrontar el duelo
Autor: Robert A. Niemeyer - Cómo sanar después de una pérdida
Autor: Pier Tingey y Magnus Jenning