Por ello, padres, madres y tutores enfermos con COVID-19, buscan mantener a su familia libre de contagios. Al respecto, el infectólogo Arturo Galindo Fraga, subdirector de Epidemiología Hospitalaria en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición «Salvador Zubirán» te explica los pasos a seguir.
15 días como mínimo
Galindo Fraga advierte que más del 90% de las personas que tienen COVID presentan la enfermedad sin complicaciones, pero aun así puedes contagiar puesto que el virus está activo en tu organismo. Por tanto, debes hacer matemáticas:
- Por ejemplo, si te contagias el día 25 del mes, tu cuerpo comenzará con síntomas (leves, moderados o muy fuertes) después de, aproximadamente, cinco días. Es decir, a partir del 30 y hasta el 9 o 10 del siguiente mes tendrás molestias.
- Los días en que el virus está muy activo en tu cuerpo será al tercer día de contagio y hasta el 15. Por ello, se recomienda no salir por 15 días a fin de evitar propagar el virus.
- No todas las personas tienen el mismo sistema inmune, por eso algunos comienzan a los cinco días con síntomas y otros nunca muestran señales de contagio.
- Algunas personas se pueden volver a contagiar, por ello, es necesario utilizar cubrebocas, aunque ya hayas tenido la enfermedad.
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Aislarte en casa, sí se puede
Aquella persona que tenga el virus, es necesario que dentro de casa traiga siempre el cubrebocas, especialmente cuando está en habitaciones compartidas: cocina, baño, sala o comedor, entre otros.
«La mascarilla ayudará a que la persona enferma no vierta la saliva (en forma de spray) a los demás, pero tampoco en superficies, como la mesa, los cubiertos, los libros y todos los objetos que estén en casa», indica Galindo Fraga, integrante de Infectious Diseases Society of America (IDSA).
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Es importante que el enfermo duerma solo y que coloque su ropa del día en un cesto donde no esté la ropa sucia de los demás. La ropa de cama (sábanas, cobijas, edredones, fundas, cobertores y almohadas) deberán colocarse en bolsas plásticas para llevarlas al cuarto de lavado.
El paciente debe procurar descansar en una habitación con todas las comodidades y un baño cercano especialmente si tiene una tos muy activa. También es recomendable, que el afectado por COVID no se bañe con otras personas, «si él o ella se encargaba de bañar a los niños o a otros familiares, debe ser relevado, puesto que es complicado usar cubrebocas dentro de un baño con mucho vapor», explica el experto.
Usa agua caliente
La recomendación es lavar la ropa del paciente (y su ropa de cama) con agua caliente, detergente y abundante agua. Respecto a los utensilios de cocina, es fundamental no compartirlos y también, lavarlos con agua caliente.
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«Si la familia no puede lavar con agua caliente la ropa y los trastes, sí debe utilizar detergente y abundante agua. Es importante que se laven los objetos a conciencia y no de pasada. Además, no hay que comer con los mismos cubiertos, vasos o platos al mismo tiempo, sino que cada integrante tenga sus propios utensilios», recomienda en entrevistado.
Incluso, se recomienda que el paciente coma en su habitación aislado, los primeros 15 tras en diagnóstico o hasta que los síntomas se hayan aliviado por completo.
El baño hay que desinfectarlo diario
Si en casa se tienen dos baños hay que dejar uno para uso exclusivo del paciente. En caso de sólo tener un baño, cada vez que termine de bañarse o utilizar el WC, se debe utilizar un preparado de dos cucharadas soperas de cloro diluidas en un litro de agua.
«Y con ese preparado hay limpiar diariamente el baño; es fundamental explicar que deben bajar la tapa del WC antes de jalar la palanca puesto que se tienen reportes de posibles contagios con las heces fecales, puesto que hay pequeñas gotas que salpican y pueden caer en la ropa, piso, manos, y de allí a otras partes de la casa», advierte Galindo Fraga.
Ventila la casa
Es fundamental que la casa esté ventilada puesto que el aire que circula dentro del hogar puede tener el virus, y es allí cuando el contagio surge. «Recomiendo abrir las ventanas y puertas diariamente y permitir que el aire circule constantemente, con ello se garantiza que el virus no se ‘estanque’ en casa y en las vías respiratorias de los demás», puntualiza.
Puedes abrir las ventanas tres veces al día, por la mañana, en la tarde y en la noche y hacerlo no sólo cuando haya enfermos en casa sino, de forma rutinaria, mientras dure la pandemia.
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Cocinar sí se puede
Lo ideal es que la persona con COVID no cocine; sin embargo, si el hogar está lidereado por una jefa de familia y sólo ella puede cocinar, deberá hacerlo con cubrebocas para evitar el riesgo de contaminación.
«Los alimentos bien cocidos, hervidos y cocinados no tendrán el virus, pero el riesgo está en servirlos con las manos sucias o sin cubrebocas; por eso, la mujer puede cocinar y otro cortar las verduras y otros ingredientes e incluso servirlos», expone Galindo Fraga.
¿Y la vida sexual?
La vida sexual y laboral puede retomarse cuando el médico otorgue el alta, o bien cuando hayan pasado más de 15 días y no se tengan síntomas ni ingesta de medicamentos.
«Todavía tenemos muchos contagios, por ello, debemos seguir en casa, saliendo lo menos posible y cuidando a nuestra familia. La distancia (1.5 a 2 metros) entre una persona y otra, el lavado de manos y el uso de cubrebocas siguen vigentes, no hay que confiarnos, todavía estamos en cuarentena», destaca el experto.
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