Lee: Cuál es el mejor tipo de crianza para tu familia
Cosas que nadie te dijo de criar niñas
1. El drama no se enseña, viene instalado
Desde los dos años, te puede tocar una mini actriz dramática que llora porque no encuentra su juguete favorito… mientras lo tiene en la mano. No es personal, no estás criando una diva. Es parte del desarrollo emocional. Las niñas tienden a expresar más sus sentimientos, y eso a veces viene con gritos dignos de telenovela.
Dato real: Las investigaciones muestran que las niñas suelen desarrollar el lenguaje emocional antes que los niños, lo que puede hacer que expresen más intensamente sus emociones (American Psychological Association, 2020).
2. La presión por verse “bonita” empieza ridículamente temprano
¿Sabías que niñas de 5 años ya pueden preocuparse por su cuerpo? Y no, no lo aprendieron en casa. Lo escucharon en la escuela, en la tele o incluso en una salida casual al súper. Vas a tener que repetir mil veces que su valor no está en su apariencia. Y luego repetirlo otra vez. Aunque te parezca exagerado, este tema va en serio.
Un estudio publicado en Developmental Psychology encontró que niñas de preescolar ya mostraban preocupación por su peso y apariencia
![]()
Shhh… La guía definitiva para enseñarle a tu bebé a dormir
![]()
![]()
3. No todas quieren ser princesas (y eso está perfecto)
No te sorprendas si tu hija dice que las princesas son aburridas y prefiere ser un dragón. Déjala. El mundo ya le ofrecerá suficientes etiquetas. En casa, lo ideal es que pueda jugar a ser lo que quiera sin que le digan qué “debería” gustarle por ser niña. Tú sólo observa y acompaña.
4. El machismo empieza con frases que parecen inofensivas
“Te ves más bonita calladita.” “Eso no es para niñas.” “Una niña debe portarse bien.” Todo eso lo va a escuchar, tarde o temprano. Y ahí entras tú. No puedes borrar el mundo, pero sí puedes ayudarle a cuestionarlo. Criar una niña también es prepararla para que se defienda, hable fuerte y no se disculpe por existir.
5. Vas a tener que hablar de menstruación antes de lo que pensabas
Te vas a sorprender cuando primaria una compañerita ya haya empezado a menstruar. Así que mejor te adelantas. Habla del cuerpo, del ciclo, de los cambios… sin pena, sin cuentos, sin «eso no se dice». Porque si no se lo explicas tú, se lo va a contar alguien más… y no siempre con buena info.
Lee: ¿Cómo hablar de menstruación con mi hija?
6. No necesitas ser su “mejor amiga”
Vas a querer protegerla de todo, caerle bien, que te cuente todo. Pero a veces toca poner límites, y eso no se hace desde la amistad. Se hace desde la maternidad o paternidad consciente, incluso cuando ella te odie por no dejarla ir a una pijamada que huele raro. Spoiler: te lo va a agradecer después. Aunque no lo diga.
7. Criar niñas también implica revisar tus propios prejuicios
Vas a descubrir que tú también creciste con ideas raras. Como que las niñas deben ser dulces, pacientes o “modositas”. Criarla bien implica reeducarte. Y sí, a veces incomoda, pero también libera.