Embarazo y matrimonio no son sinónimos
El matrimonio puede existir sin el embarazo y éste último también surge sin un compromiso matrimonial. Cuando una mujer embarazada decide separarse de su pareja y continuar esta etapa sola, puede ser por alguna de estas razones:
Violencia doméstica.
Cuando la mujer embarazada decide no seguir con su pareja es porque sufre diversos tipos de violencia. Entonces, quiere proteger a su bebé de ese ambiente.
Infidelidad.
Una mujer embarazada que ha sido engañada presentará un cúmulo de emociones desbordantes debido a la acción de las hormonas, pero también frente al dolor que significa la traición de la pareja.
Inseguridad frente a la pareja.
En ocasiones la mujer embarazada duda o sabe con mucha certeza de la incapacidad que tiene su pareja frente al compromiso de formar una familia. Es decir, la crianza, la paternidad activa y la responsabilidad no son características que haya visto en su pareja. Y por tanto, la mujer prefiere seguir su embarazo sin él.
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Falta de amor o desamor.
La llegada de un nuevo integrante de la familia mueve muchos sentimientos, entre ellos, el amor para con la pareja. Y en ocasiones, la mujer embarazada descubre que el amor que sentía por su compañero ya desapareció y no quiere vivir en un matrimonio fingido o irreal.
¿Qué pasa con tu hijo si te divorcias o separas?
Sin importar la razón que tuvo la mujer para seguir su embarazo de forma autónoma, el papá biológico tiene patria potestad o derechos y obligaciones:
- Tener la custodia compartida de su hijo o hija.
- Proporcionarle una pensión digna que sea suficiente para su alimentación, vestido, educación, salud y diversión.
- Derecho a la convivencia con el menor de edad.
- Fomentar la seguridad física, psicológica y sexual del menor de edad.
En caso de que el padre pierda la patria potestad de su hijo, también pierde ciertos derechos, pero no sus obligaciones.
Lo ideal es siempre acercarse a un abogado para que revise (especialmente si está casada) cada caso en particular, porque toda mujer embarazada vive ciertas circunstancias que la hacen preferir seguir en solitario que con el padre de su crío.