¿Por qué se hinchan los pies en el embarazo?
Todo empieza con los cambios hormonales. Desde las primeras semanas, tu cuerpo empieza a producir más progesterona, una hormona que, entre muchas otras cosas, relaja las paredes de los vasos sanguíneos. Esto hace que circule más sangre, pero más lentamente.
Además, tu volumen de sangre aumenta hasta un 50% durante el embarazo. Sí, la estás rompiendo… pero ese extra de líquido se acumula en los tejidos, especialmente en los tobillos y pies.
Otro factor: el útero va creciendo y hace presión sobre las venas que devuelven la sangre de las piernas al corazón. Esto dificulta el flujo normal y hace que se retenga líquido en la parte baja del cuerpo.
Y si todo esto no fuera suficiente, también entra en juego la gravedad. Estar mucho tiempo parada o sentada puede hacer que la hinchazón empeore al final del día.
¿Y la hinchada de pies en el posparto?
Si pensabas que en cuanto naciera tu bebé tus pies volverían a la normalidad… no siempre es así. Durante el posparto, el cuerpo empieza a eliminar el exceso de líquidos acumulados. Lo hace a través del sudor y la orina, por eso muchas mujeres sudan más de lo normal en el posparto.

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Sin embargo, este proceso puede tardar algunos días. Mientras tanto, es posible que notes los pies incluso más hinchados que antes. También influye el tipo de parto que tuviste: si fue por cesárea o recibiste muchos líquidos por vía intravenosa, la retención puede durar un poco más.
¿Cuándo sí deberías preocuparte?
- Hinchazón súbita en cara, manos o pies
- Dolor intenso o sensibilidad en una sola pierna
- Enrojecimiento o calor en la zona hinchada
- Dificultad para respirar
Estos podrían ser síntomas de preeclampsia (una complicación del embarazo que eleva la presión arterial) o de una trombosis venosa profunda (un coágulo en las piernas).
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¿Qué puedes hacer para sentirte mejor?
- Eleva los pies cada vez que puedas.
- Evita cruzar las piernas al sentarte.
- Usa ropa y zapatos cómodos, nada que corte la circulación.
- Hidrátate bien, aunque parezca contradictorio. Beber suficiente agua ayuda a eliminar líquidos retenidos.
- Camina o haz movimientos suaves con los pies si estás mucho tiempo sentada.
- Usa medias de compresión si tu médico lo aprueba.