“Cuando una mujer fue sometida a más de tres cesáreas, su útero desarrollará diversas cicatrices —hechas justamente por el corte con el bisturí de la cesárea— y cuando vuelva a embarazarse es probable que la placenta se adhiera a dichas cicatrices y salga del útero hacia otros órganos como la vejiga y los riñones”, precisa el experto.
Placenta invasora, riesgo de hemorragia
“La placenta invade otros órganos y ello pone en riesgo la vida de la mujer, por tanto, deberá ser atendida en un hospital de alta especialidad, puesto que este embarazo se resolverá con cesárea para sacar al bebé, pero también se tendrá que quitar la matriz y se brindará tratamiento oncológico para tratar a la placenta invasora como un tumor, a fin de que se conserven intactos tanto a la vejiga como a los riñones”, precisa el experto, quien es uno de los ginecólogos expertos —en México y América Latina— en placenta invasora.
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El riesgo de una placenta invasora mal atendida es la hemorragia masiva, la cual pone en riesgo la vida de la mamá. “La mayoría de las placentas invasoras son tratadas en el Hospital General de México, pues aquí desarrollamos un protocolo de atención que ha ayudado a miles de mujeres en todo el país”, precisa el experto, quien recomienda hacerse un ultrasonido para revisar dónde está la placenta y si se encuentra en una zona de riesgo deberá ser revisada por un cirujano experto.
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Las cesáreas en México, a la alza
De acuerdo con el entrevistado, las cesáreas en México se hacen incrementado alarmantemente. “En México hay hospitales, principalmente privados en los que los nacimientos naturales (vía vaginal) prácticamente son nulos, y el número de cesáreas es del 100 por ciento”, indica.
Existen diversos factores que han incrementado las cesáreas en todo el país. Por ejemplo, hay mujeres que le dicen al ginecólogo que no quieren tener un trabajo de parto por miedo, desconocimiento o practicidad; otra causa son los seguros médicos que no cubren partos sino cesáreas, tampoco cubren al bebé y la mujer opta por resolverlo con una cesárea para que haya menos complicaciones médicas.
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“Otro motivo para la alza de las cesáreas son los temas políticos y administrativos de un hospital que no desea ser demandado porque una mujer tarda en trabajo de parto. Es decir, hay mujeres que pueden tener más de 12 horas de labor de parto y no hay camas suficientes para atenderlas, por ello, las políticas del hospital es hacer cesáreas, entre más rápido se atienda a la mujer es más económico para el hospital”, precisa el experto.
Al respecto, la Organización Mundial de la Salud afirma que sólo 20 por ciento de los nacimientos en el mundo deberá resolverse por cesárea, el resto tienen que ser partos naturales.
“Lamentablemente esto no ocurre así, aunado a ello está demostrado que una cesárea no brinda la protección bacteriana que necesita la piel, el estómago y los pulmones del recién nacido, puesto que las bacterias protectoras de dichos órganos se localizan en el canal vaginal, por donde usualmente deberá nacer un bebé”, precisa Briones Garduño y a consecuencia de ello, tenemos más casos de alergias, problemas gástricos y enfermedades de la piel en los niños mexicanos.
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