Su historia…
En 2022, Pau Zurita y su pareja, Alejandro Serralde decidieron empezar una vida juntos casándose por el civil y después con una ceremonia religiosa. Cinco años más tarde, decidieron formar una familia con su primera hija Renée.
A lo largo de este tiempo, en redes sociales ha compartido toda la experiencia de la maternidad, desde el anuncio oficial hasta la historia de cómo vivió su parto.
«El otro día me preguntaron que qué se sentía ser mama y les cuento que superó todo lo que alguna vez imaginé. Creía que sabía lo que significaba… pero la realidad me llevó mucho más lejos y superó todas mis expectativas. Ser mamá es felicidad pura, plenitud absoluta y un amor que jamás había experimentado y que es muy difícil poner en palabras»
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¿Cómo vivió Pau Zurita su parto?
Hace pocos días, Pau subió a sus redes sociales un video junto a su ginecóloga, la Dra. Ana Paola Sánchez Serrano todas sus anécdotas y experiencias de su parto.
Al principio narra que todo su embarazo fue feliz, pleno y sin ninguna complicación, además de que siempre le dio prioridad a hacer ejercicio, comer saludable y dormir muy bien.
Sin embargo, las complicaciones empezaron en las últimas semanas de su embarazo. Específicamente ella lo vivió en la semana 38-39 donde notaron que Renée estaba en una posición un poco extraña, problema que se resolvió con ejercicios de pelota y acupuntura.
Además, en las semanas 38, 39 y 40 no tenía nada de dilatación. Dentro de la historia, Pau comparte que fue un momento muy estresante y preocupante, sin embargo decidieron llegar a la semana 41 para darle más tiempo a Renée para que naciera sin ninguna prisa.
Otra situación que se les presentó en el camino, es que Pau siempre quiso vivir un parto natural por todo lo que conlleva en cuanto a conexión con el bebé y porque tenía la boda de su hermano Andy en pocos días. Sin embargo, Pau llegó a la semana 41 donde su ginecóloga le dijo que si no nacía en los próximos días tendrían que recurrir a la inducción.
«Comparto mi experiencia, los miedos que tuve —especialmente a la inducción— y cómo
fue, finalmente, vivir ese momento tan transformador»
Finalmente, gracias al uso de una sonda de foley que le ayudó a dilatar mucho más rápido, ejercicio durante el embarazo y en sus últimas semanas, la correcta técnica y guía de su ginecóloga y que Pau siempre presentó una salud impecable pudieron lograr un parto natural.
Después de 17 horas de trabajo de parto, llegó Renée con salud perfecta y lista para convertirse en la mayor enseñanza y alegría de su mamá.