Después de décadas dedicadas a su familia, su rol público y la crianza de sus hijas, Michelle Obama abre un nuevo capítulo en su vida, marcado por cambios y nuevas decisiones personales.

Hoy, con sus hijas ya adultas y viviendo su propia etapa fuera de casa, redefine lo que significa ser mamá y mujer en esta nueva etapa de libertad, reflexión y crecimiento personal.

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De una mamá en el enfoque público… a mujer que toma sus propias decisiones

Durante su vida pública, la ex primera dama tuvo que aprender a combinar su papel de mamá con todas las responsabilidades de la casa Casa Blanca. En este contexto, como ella lo contó en su nuevo libro «The Look», optó por contratar a un estilista y no por vanidad, sino por practicidad, para liberar un poco de espacio mental y centrarse en lo que realmente importaba.

Hoy, con sus hijas adultas, Michelle tiene la oportunidad de recuperar su individualidad mencionado: «Es la primera vez en mi vida en la que cada decisión que tomo es mía».

Confianza y seguridad: un legado familiar

Para ella, la verdadera confianza y seguridad no nace de la fama ni del éxito, sino del amor y el respeto sembrado en cada familia. Cuenta que creció en un hogar donde su voz era escuchada, sus ideas eran valoradas y no minimizadas, algo que marcó su vida.

Es la base que le ha permitido afrontar las opiniones externas, la resistencia de un mundo racista y a no darle importancia a los prejuicios.

Educar para la independencia

Michelle Obama menciona que su mamá siempre les enseño a ella y a su hermano a «vivir con y sin ella», es un mensaje de amor pero también muy fuerte en autonomía. Ahora quiere transmitir lo mismo a sus hijas para que sepan valerse por sí mismas, amarse, pero no depender emocionalmente de ella.

Vivir el presente, con gratitud

El cuidar a su mamá en sus últimos años marcó profundamente su perspectiva, mencionó que la vida se va rápido y no siempre estamos preparados para los cambios. Por eso hoy dice que su meta es estar presente en cada momento, disfrutar esta etapa con plenitud y decidir con libertad.

Su mensaje para otras mamás es aceptar y valorar el «final» de una etapa como el inicio de otra.

Toma de consejos de mamás experimentadas

Más allá de lo profundo, Michelle Obama aclaró en tono burlón que no se deben escuchar consejos de «mommy bloggers» jóvenes, ya que el criterio y los buenos consejos lo dan los años, la experiencias y las propias decisiones.