fbpx


La otra mamá de mi casa

Gracias por todo su cariño y tiempo que siempre va mucho más allá de lo que su trabajo pide y que nunca titubean en darlo.

Cada 10 de mayo celebramos a nuestras madres. Generalmente damos un regalo o una carta, y pasamos el día juntos. Me parece muy bien esta celebración, pero si me permiten, me gustaría recordar también a todas esas personas que fueron importantes para nosotros al crecer y que forman parte de nuestra memoria. Pudo haber sido una enfermera, la nana, el chofer, la tía o los abuelos. Muchos crecemos con diferentes figuras paternas y maternas y a pesar de tener padres (o no), ellos tienen un lugar espacial en nuestro corazón. Ellos jugaban con nosotros, nos hacían reír y nos consolaban. A veces nos entendían mejor que nuestra propia familia, eran nuestros amigos incondicionales.

Me acuerdo que de pequeña jugaba mucho con Irene. En su tiempo libre me tejía ropita para mis muñecas – que aunque jugaba poco con ellas- me daba una ilusión enorme ponerle esos vestidos hechos a mano. También me acuerdo que cuándo tenía miedo y no estaban mis papás en la casa, me subía a dormir con ella y a pesar de despertarla e incomodarla en su cama, me recibía con una sonrisa y mucho cariño.

Sé de otra historia en la que el chofer se dedicaba a jugar fútbol todos los días con el hijo único de la casa después de la escuela. Una vez de cumpleaños le consiguió la camiseta de su equipo favorito con su nombre impreso atrás. Hasta la fecha lo recuerda como uno de los momentos más entrañables.

En México muchos de nosotros crecimos con figuras así, muy cercanas; pero no les hemos podido agradecer su cuidado y cariño ni todos los recuerdos que llevamos dentro.

Hoy que soy mamá veo la relación que mis hijas tienen con María, una cariñosísima enfermera, y a pesar de que se me apachurra el corazón de compartir mi maternidad con ella, tiene un valor único para mi familia. Es la otra mamá de mi casa y da lo que a veces yo no puedo.

Si no lo he hecho claro aún, lo digo nuevamente: gracias a todos los que nos ayudan en casa con nuestros hijos, son importantísimos. Gracias por todo su cariño y tiempo que siempre va mucho más allá de lo que su trabajo pide y que nunca titubean en darlo.



Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.

¡Gracias y muchas felicidades!

mamademicasa

Mamá Gallina

mamá gallina

Comparte esta nota

Más sobre este tema

Qué te pareció esta nota

0 / 5. 0

TAGS: