- La pintura de las paredes
En la actualidad están hechas sin mercurio o sustancias orgánicas volátiles que pueden poner en riesgo su salud, pero por si acaso, revisa que la que usaste para decorar su cuarto no tenga «éteres de etilenglicol» o «biocidas». En la etiqueta deberá decir “libre de COV’s” o “libre de látex”. Si ya está pintada y no tienes idea de cuál fue la que usaron, mantén el área siempre ventilada en lo que puedes cambiarla.
- El cajón de cosméticos
No hay lugar más divertido y emocionante para una niño que el cajón donde su mamá guarda toda clase de coloridos lápices y brochas para “pintar las paredes” – y por qué no – la cara, su ropa y descubrir si sabe rico. Para evitar que los químicos de tus cosméticos le hagan daño o se asfixie, manténlos en alto.
- Líquidos para limpiar
Esto es algo que siempre se dice pero no muchos papás toman verdaderamente en cuenta. Nunca se te ocurra poner líquidos limpia pisos o detergentes en botellas de refresco. También considera que, cuando tu bebé empiece a gatear, deberás tener mayor limpieza en las áreas por dónde lo hace, pero siempre cuida que los productos que utilices no sean tóxicos. Si tu bebe tiene asma evita el cloro y aromatizantes, pues pueden elevar 40% el riesgo de ataques.
- La calidad del aire
Aunque no lo creas, a veces el aire dentro de tu casa es mucho más sucio que el de la calle, y todavía más si tienes mascotas. ¡Imagínate todo el polvo que se guarda en los tapetes y sillones! Incluso el clima o aire acondicionado si no se limpia constantemente, arrojará aire sucio que podrá dañarlo.
- Plásticos
Seguramente ya has escuchado de las nuevas normas anti BPA’s en biberones, tuppers y otros productos. Y si no, de ahora en adelante fíjate que los plásticos que compres estén libres de esta sustancia. Recuerda que están incluidos juguetes, vasos y otros artículos de uso diario en tu casa.
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