fbpx

, , , ,

Así cambia tu cerebro antes y después de ser mamá

/

Tu cerebro no vuelve a ser el mismo después de tener un bebé. Te contamos qué pasa científicamente en tu cabeza antes y después de ser mamá, y por qué no es “locura hormonal”.

cerebro antes y después de ser mamá
Antes del embarazo, tu cerebro funciona en modo “yo”. Tu atención, energía y emociones giran principalmente alrededor de tus propias metas, relaciones y rutinas. Todo cambia cuando llega la maternidad. Literalmente, tu cerebro empieza a reconfigurarse, incluso antes del parto.

Durante el embarazo, las hormonas —como el estrógeno, la progesterona y la oxitocina— remodelan regiones cerebrales ligadas a la empatía, la memoria y el reconocimiento emocional. Según un estudio publicado en Nature Neuroscience, las mujeres embarazadas muestran una reducción de materia gris en áreas sociales del cerebro. Pero no te asustes: eso no significa pérdida, sino optimización. Tu cerebro se vuelve más eficiente para detectar las necesidades de tu bebé y responder con sensibilidad. En otras palabras: se apaga el ruido para encender el radar maternal.

También lee: ¿Cuándo se regulan tus hormonas posparto?

Tu cerebro después de ser mamá

Después del parto, la transformación continúa. El cerebro de una mamá recién parida se parece al de alguien enamorado. Y no es metáfora. La oxitocina, la llamada “hormona del amor”, se dispara cada vez que ves, hueles o escuchas a tu bebé. Esa química te impulsa a cuidarlo y protegerlo, incluso con el sueño por los suelos.

Además, las regiones relacionadas con la recompensa —como el núcleo accumbens y la amígdala— se vuelven hiperactivas. Por eso, aunque estés agotada, una simple sonrisa o balbuceo de tu hijo puede darte un subidón emocional más potente que el café.

Lee: ¿Cuánto tiempo tarda tu cerebro en regresar a la normalidad después del embarazo?

Master Bbmundo 2025 Master Bbmundo 2025

Pero no todo es miel hormonal. También hay un reacomodo emocional fuerte. El hipocampo, responsable de la memoria, se ve afectado temporalmente por la falta de sueño y el estrés posparto. Así que si olvidas dónde dejaste el celular o las llaves, no estás sola: es parte del ajuste neurológico.

Tu cerebro no “se daña” por ser mamá, se reorganiza. Se vuelve más sensible, intuitivo y multitarea. Pero también más vulnerable a la ansiedad y el agotamiento. Por eso es clave cuidarte, dormir (cuando se pueda) y pedir ayuda.

Curiosamente, estos cambios cerebrales pueden durar hasta dos años después del parto, y algunos científicos creen que permanecen toda la vida. En cierto modo, la maternidad te da un cerebro nuevo: más conectado con otro ser humano, pero también más exigente contigo misma.

Así que no, no estás loca. Estás literalmente reprogramada para sobrevivir, criar y amar.

Fuentes:

  • Nature Neuroscience: “Pregnancy leads to long-lasting changes in human brain structure.”
  • Behavioral Neuroscience: “Maternal brain plasticity: Adaptation to motherhood.”
  • National Institutes of Health: “How pregnancy and childbirth change the brain.”

Comparte esta nota

Qué te pareció esta nota

0 / 5. 0

TAGS: