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En su papel como “chief confidence officer” de Bobbie, Cardi B busca normalizar la alimentación con fórmula y visibilizar problemas de salud materna, como la mortalidad materna y la falta de licencia pagada. Su experiencia personal la motivó: dificultades con la producción de leche y depresión posparto.
“Algunas veces tu bebé quiere comer cada dos horas y otras cada 45 minutos. Me toma dos horas producir solo dos onzas de leche”, comenta Cardi. Esta situación la hizo cuestionarse si era menos mujer por no producir la misma cantidad que otras mamás. Situaciones como esta muestran lo frustrante que puede ser cumplir con expectativas irreales.
Además, Cardi destaca que cada embarazo es diferente. Sus hijos Kulture, Wave y Blossom llegaron en distintas etapas de su vida, y el regreso al trabajo le ayudó a sentirse más como ella misma. Pero subraya algo importante: ninguna mamá debería sentirse presionada a regresar al trabajo, especialmente si es su primer hijo.
“Quiero que quede claro que regresar al trabajo es mi forma de sobrellevarlo, no un ejemplo a seguir. Cada mamá vive su propia experiencia. Tener un primer hijo realmente cambia tu mundo, es un gran reto y es transformador”, explica.
Esta campaña no solo celebra la alimentación con fórmula, sino que también busca que más mujeres tengan información y confianza para decidir qué es mejor para ellas y sus bebés. Además, abre la conversación sobre la necesidad de políticas de apoyo a la maternidad, desde licencias más largas hasta apoyo en salud mental.
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En resumen, si alguna vez dudaste de tus decisiones como mamá, Cardi B y Bobbie te recuerdan que no hay una única manera correcta de alimentar o cuidar a tu hijo. Lo importante es sentirte segura y respaldada en cada elección.
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