¿Qué es un muñeco de apego?
Un muñeco de apego es ese objeto al que tu hijo se aferra porque simplemente le da calma y con el que se siente seguro. Sobre todo en momentos difíciles o de cambio. Esta idea fue estudiada por el pediatra y psicoanalista inglés Donald Winnicott, quien lo llamó también objeto transicional. Según él, éstos ayudan a los niños a sentirse conectados con sus cuidadores, aun cuando no están cerca de ellos.
A partir de los seis meses y más o menos hasta el año, los bebés empiezan a darse cuenta de que son seres separados sus mamás o figuras principales. Esta etapa, que Winnicott llamó «angustia del octavo mes», puede ser un estresante para ellos y el muñeco de apego es como un puente emocional que les da esa sensación de seguridad.
Los beneficios que no sabías del muñeco de apego
- Les da seguridad emocional
- Ayuda a su independencia
- Es clave en transiciones importantes (desde el primer día en la guardería hasta aprender a dormir solos)
Además de Winnicott, la psicóloga Aletha Solter, dice que los muñecos de apego no solo ayudan a calmar a los niños, sino que también les enseñan a gestionar sus emociones y a sentirse seguros incluso cuando mamá o papá no están cerca.
¿Cómo elegir y cuidar el muñeco de apego?
No quieras darles tu juguete de cuando eras chico, mucho menos la manta que le bordó la abuela, ellos lo van a elegir si es que lo necesitan.
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- Déjalos elegir
- Mantenlo limpio, lávalo de vez en cuando, pero hazlo junto a ellos para que no lo den por perdido
- Dale tiempo… Mientras que algunos niños dejan su muñeco a los tres años, otros lo necesitan más tiempo, ¡y está bien! Es parte del desarrollo infantil
