Esto podría deberse a varias razones como vómitos, diarrea, fiebre o ingesta de líquidos disminuida e incluso por golpes de calor. La deshidratación en niños severa puede llevar a complicaciones y es particularmente peligrosa en los niños debido al bajo peso corporal y metabolismo más rápido.
Por eso, platicamos con Alejandro Frade, pediatra y neonatólogo por el Boston Children’s Hospital de Harvard, para entender cuáles son los signos de alerta por deshidratación en niños, según la edad de los niños.
Cómo saber si mi hijo está deshidratado, según su edad:
En bebés menores de 1 año:
- Revisar bien la fontanela (punto blando en la cabeza del bebé) hundida
- Pocas lágrima al llorar
- Ojos que parecen hundidos
- Boca y lengua secas
- Actividad disminuida o alta irritabilidad aumentada
- Sueño inusual
- Menos pañales mojados
- Manos y pies fríos y descoloridos
En este grupo de edad contacta a tu pediatra inmediatamente. Para la rehidratación de bebés, comienza con pequeñas tomas frecuentes de una solución de rehidratación oral (SRO), además de la lactancia regular o la fórmula.
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Esto proporcionará los electrolitos necesarios además de la hidratación. Evita el agua, el jugo o el refresco, ya que podrían no reponer los electrolitos esenciales perdidos y una pérdida elevada podría ser perjudicial.
Deshidratación en niños de 1 a 3 años:
- Pocas lágrima al llorar
- Ojos que parecen hundidos
- Boca y lengua secas
- Actividad disminuida
- Sueño inusual
- Menor producción de orina, orina amarilla oscura
- Ausencia de pañales mojados durante 3 horas o más
- Sed y rechazo a comer
- Piel que no se aplana cuando se pellizca y se suelta
- Para la rehidratación, similar a los bebés, utiliza una solución de rehidratación oral. También puedes probar paletas heladas hechas con estas soluciones. Comienza con pequeños sorbos frecuentes cada 15 minutos, aumentando gradualmente según se tolere.
En niños mayores de 3 años:
- Quejas de sed
- Menos elasticidad en la piel
- Menos frecuencia en la orina
- Orina amarilla oscura o marrón
- Boca seca o pegajosa
- Fatiga o mareos
- Ojos que parecen hundidos
- Irritabilidad o disminución en los niveles de actividad
Para rehidratar a un niño, continúa ofreciendo sorbos frecuentes de una solución de rehidratación oral. A medida que los síntomas mejoren, re-introduce gradualmente la dieta regular del niño, comenzando con alimentos blandos y fáciles de digerir.
Síntomas de deshidratación que requiere atención médica
Independientemente de la edad, estas medidas deben iniciarse ante los primeros síntomas de deshidratación. Sin embargo, también hay ciertos signos que indican que se debe buscar atención médica inmediata:
- Letargo severo o disminución de la capacidad de respuesta
- Ausencia de producción de orina durante 8 horas en niños mayores, o 6 horas en bebés y niños pequeños
- Incapacidad para retener líquidos debido a vómitos
- Signos de shock como manos y pies fríos y azulados (moteados) o un pulso débil pero rápido
- La deshidratación en niños causa respiración rápida o una frecuencia cardíaca significativamente elevada