De acuerdo con Kirshenbaum, los bebés estimulan sus labios durante la succión al seno materno o al biberón, y además son llenados de besos por los padres. Es cuando esas primeras sensaciones son asociadas con sentimientos de amor, comodidad e incluso, seguridad. Por ello, cuando los bebés crecen, quieren volver a disfrutar esas sensaciones y comienzan a besar.
Además, besar a un ser amado genera una serie de cambios neuroemocionales porque los besos liberan sustancias cerebrales que ayudan a mejorar el vínculo emocional. Así, que tanto para los padres como para los hijos, los besos son clave para un desarrollo sano.
Tipos de besos
Los besos son diferente entre las personas pues depende del vínculo. De esta manera, los besos que se le dan a un hijo no son los mismos que a una pareja o un padre. Ello depende de los vínculos.
Por ello, los besos que se dan a los hijos siempre involucran un amor paternal, de cuidado y apoyo. Además, a medida que crece el crío, él mismo marcará el ritmo de los besos que quiere o no recibir de los padres.
Los besos son esenciales para los bebés y niños pequeños, puesto que ayudan a:
1. Calmar los miedos: Especialmente cuando un niño se siente solo, está en un nuevo lugar o se va a cambiar de la habitación de los padres a su propia recámara.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
2. Dar confort: Cuando alguien es besado, regresa la paz a su cuerpo, especialmente si hay llanto, se tiene un berrinche o se está viviendo una pérdida (la muerte de los abuelos, el cambio de casa o la pérdida de una mascota, entre otros).
3. Sentir seguridad: Los besos para un número importante de personas son “malos”, pero los críos que fueron besados desde su primera infancia son más seguros de sí mismos y tienen mayor seguridad.
4. Ser más divertido: Los pequeños besos (piquitos) o los besos con trompetilla son una expresión no solo de amor sino también de diversión Y los niños que suelen ser besados de esa manera, viven la vida más relajada, divertida y armónica.
5. Mejorar las relaciones: Los besos hacen que el cerebro libera sustancias como la oxitocina, la dopamina y la serotonina, las cuales juegan un papel importante en nuestras relaciones interpersonales.
¿Cuándo besar a tus hijos?
Los niños se deben besar todo los días, pero especialmente en momentos clave, entre los que están:
♥ Al lograr un triunfo académico.
♥ Al seguir normas y reglas de casa.
♥ Cuando se sientan tristes, confundidos o asustados.
♥ Cuando estén en momentos de incertidumbre.
♥ Al despertarse por las mañana y al irse a la cama, por las noches.
“Los niños amados, respetados y valorados, son besados y abrazados constantemente. Esos cariños son un tónico para su cuerpo, pero especialmente para su corazón y cerebro que están pleno desarrollo”, recomienda el pediatra-neonatólogo Javier Sánchez Nava, presidente de la Asociación de Pediatras de la Ciudad de México.
Si quieres ver más notas sobre los besos, lee esto:
→ Deja de preguntarle a mi hijo si tiene novia
→ ¿Es bueno besar a tu hijo en la boca?
→Enfermedades que se transmiten a través de los besos
David Beckham besa a su hija de 10 años en la boca y lo atacan en redes