Las primeras señales externas son: suspensión de la menstruación, náuseas matutinas e inflamación y dolor en los pechos. Sin embargo, las señales inequívocas de la gestación son el sonido del latido del corazón del feto (que es posible oír entre la 16ª y 20ª semanas del embarazo), las imágenes de ultrasonido (que se pueden observar durante los nueve meses) y los movimientos fetales.
Si eres de esas mujeres que determinan la fecha de su ovulación tomando su temperatura corporal, notarás al despertar una elevación continua de ésta bastante más allá del día en que debía presentarse tu menstruación. Si estás embarazada, durante los primeros meses:
- Tendrás que orinar con frecuencia, porque el crecimiento del útero presiona la vejiga
- Te sentirás cansada y adormilada
- Los alimentos que antes te agradaban probablemente te dejarán de gustar
- Sensación de pesadez en la pelvis
- Náuseas
- Sentirás dolor en los costados, ya que el útero al crecer estira los ligamentos redondos que ayudan a sostener a tu bebé
La mayoría de estos síntomas disminuyen al progresar el embarazo, pero son tan definidos para la semana 12 que el diagnóstico rara vez es problema.
Diagnóstico clínico
Las pruebas biológicas del embarazo dependen de la producción de gonadotropina coriónica, una hormona estimulante de los ovarios que está presente en la placenta. Estas pruebas tienen una precisión de 95% aunque suelen dar falsas negativas. La presencia de gonadotropina coriónica en la sangre de una mujer sólo indica la presencia de tejido placentario vivo, pero no indica nada acerca del feto y, de hecho, hay casos en que se desarrolla la placenta incluso en ausencia de este último.
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Hay «señales» que le indicarán a tu médico si estás embarazada. Por ejemplo:
- Oscurecimiento de la areola del pezón y la prominencia de las glándulas sebáceas alrededor de este último
- Decoloración rojiza de los tejidos de la vulva, la vagina y el cuello del útero
- Reblandecimiento del útero y de la parte inferior de la matriz
Sin embargo, aunque todos estos son indicadores del embarazo, no son definitivos. Hay problemas médicos que pueden dar un falso diagnóstico. La menstruación puede suspenderse por enfermedad crónica, alteraciones emocionales o endocrinas, temor o deseo de estar embarazada. La náusea y el vómito pueden deberse a problemas gastrointestinales o psíquicos y la inflamación de los senos a un desequilibrio hormonal.
En cualquier caso si sospechas que estás embarazada, consulta a tu médico.
