En el estudio, realizado en mujeres con un promedio de edad de 31 años, se analizaron muestras de la placa dental y el líquido amniótico de las voluntarias. Los resultados confirmaron la presencia de ADN de un tipo de bacteria bucal ―aunque en mínimas cantidades― en 7 de las 48 muestras sometidas a prueba.
Además, se encontró una asociación entre algunos microbios, bacterias de la boca, líquido amniótico y complicaciones en los embarazos; incluyendo abortos, partos prematuros, muerte del recién nacido y ruptura temprana de las membranas de saco amniótico.
A pesar de los datos recogidos, Caroline Bearfield y sus colegas de la Escuela de Medicina y Odontología de Queen Mary, de la Universidad de Londres, informaron que deben realizarse más estudios para confirmar la investigación.

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