- Dile cómo te sientes y qué esperas en todo momento, así se trate de un regalo.
- Pide ayuda amablemente y no como si fuera una obligación.
- No grites. Cuando discutan háganlo como si las ventanas estuvieran abiertas y los pudieran escuchar los vecinos y nunca peleen delante de sus hijos.
- Olvida lo pasado. No guardes rencores ni revivas los errores de tu pareja.
- Admite tu parte de culpa en los conflictos. Se necesitan dos para discutir.
- Evita la frase “te lo dije”.
- Ponte en su lugar y piensa que le haría feliz. Dale gusto de vez en cuando y hagan lo que el otro proponga.
- Resalta siempre lo positivo y lo bueno de su relación. Evita las críticas.
- Aprende a ceder. No siempre se gana, lleguen a un acuerdo que los satisfaga a los dos.
- Respétense ante todo. Evita gritar, insultar o hacer uso de la violencia física.
Las etapas de la relación:
- Felicidad. Cuando todo es miel sobre hojuelas. Comparten los mismos gustos, tienen los mismos sueños, hay romance, cariño y admiración. Es la base de su relación.
- Diferencias. Es cuando nos preguntamos: ¿con quién me case? y ¿por qué? En esta etapa los niños son catalizadores de conflicto y existe el peligro de infidelidad por la frustración que nos causa querer cambiar a la pareja y no lograrlo.
- Identidad. No cuestionamos sobre quiénes somos. Es una etapa crucial en la que se definen las necesidades de cada miembro. La premisa es el respeto a las diferencias.
- Amistad. Cuando decidimos ser amigos. Hay cortesía y respeto, acuerdos de cooperación, entendimiento y un sentimiento más fuerte.
- Vínculos afectivos firmes. En esta etapa se da la unidad de pareja y un amor profundo. Es la mejor época de los matrimonios porque logran estabilizar su relación.
Tips para superar las etapas:
Cada una de las etapas de la pareja genera crisis y conflictos que se pueden superar poniendo lo mejor de cada uno. Algunos consejos para superar los problemas son:
- Hablen de su relación y su evolución como pareja: qué les gusta y qué no, cómo pueden cambiarlo.
- Comprométanse para que su matrimonio funcione. Es un trabajo de dos.
- No pierdan los detalles y el interés por el otro todos los días.
- Demuéstrense su amor con abrazos, besos y caricias. Tómense de la mano y mírense a los ojos.
- No pretendan que todo está bien. Si tienen problemas, intenten resolverlos o busquen ayuda profesional.
- Apóyense en los momentos difíciles e importantes.
- Conversen sobre sus sentimientos, pensamientos y necesidades.
- Si sienten ira, traten de identificar su origen y darse un tiempo para tranquilizarse.
- Sean empáticos con su pareja. Si se siente triste, preocupada o enojada, póngase en su lugar y hágánle saber que entienden lo que está viviendo.
Y ¿el sexo?
Es verdad que con la llegada de los hijos el sexo cambia, pero puede ser la oportunidad de hablar abiertamente sobre el tema y convertirlo en una experiencia más profunda.
El aumento de peso, el coito doloroso, las barreras psicológicas, la sobrecarga laboral y la falta de tiempo pueden interferir con la pasión y afectar su vida sexual. Para acercarse más en este aspecto:
- Platica con tu pareja sobre sus dudas y temores.
- Prepárate para un cambio en tu vida sexual.
- Experimenten cosas nuevas y formas alternativas de dar placer.
- Si hay dolor consulta al médico.
- Como hombre, se empático con la fisonomía de la mujer y hazla sentir bella y segura de sí misma.
- Mímense y dense mucho cariño. Descubran qué es lo que le produce placer al otro.
- Salgan a cenar y hagan planes para fines de semana románticos.
- Renueven su rutina, sus gestos afectivos y experimenten nuevas posiciones sexuales.
No dejen que las exigencias de los niños acaben con su relación. Un matrimonio feliz hace a una familia feliz.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.