Sabemos que la llegada de un recién nacido a tu familia pone tu mundo de cabeza y más si es el primer hijo. Nadie nos enseña a ser padres y entre el consejo de la mamá, la suegra, la abuelita y la tía, lo único que hacemos es confundirnos cada vez un poco más.
No hay que tener miedo, en ocasiones es sólo cuestión de instinto. Porque te entendemos y a todas nos ha pasado alguna vez te dejamos estos tips básicos, así te darás una idea y los miedos no te detendrán.
- ¡Disfruta a tu hijo! Aunque llegan con grandes responsabilidades, también te traen la mayor de las alegrías
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- No exageres: el bebé tiene que acostumbrarse a los ruidos de la casa, evita pedir a todos que se callen cuando esté dormido y sea de día
- Aprovecha los momentos en que esté durmiendo para descansar también
- Tú eres el termómetro del bebé: evita taparlo mucho
- Por si acaso, ten a la mano supositorios de glicerina
- Si llora, averigua qué necesita (cambio de pañal, si tiene calor o hambre) y atiéndelo, esto le va a dar confianza
- Dale de comer cuantas veces te lo pida. Conoce todo sobre la libre demanda
- Ten siempre algún tipo de pomada para rozaduras. Prefiere las que tengan en su fórmula dexpanthenol.
Nadie mejor que tú va a entender a tu bebé, no te aceleres mucho y déjate consentir.