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Los riesgos del estrés

¿Presiones en el trabajo y la casa? Tu estómago también lo siente. Aprende a cuidarlo con estas recomendaciones.

Muchas cosas nos pueden hacer sentir un nudo en el estómago: cambiar de trabajo, hacer un coraje, hablar en público… Inevitablemente todos pasamos por momentos de estrés. Pero más allá de esta sensación, ¿sabes cómo influye en la salud de tu estómago?

Descúbrelo y prevén los efectos negativos de vivir constantemente estresada.

Las dos caras del estrés

El estrés es una reacción natural del cuerpo para responder a situaciones desafiantes.

  • Lo bueno: Cuando se presenta ocasionalmente favorece la percepción, ayudando a actuar de manera más rápida para enfrentar retos y cumplir metas.
  • Lo malo: A largo plazo, además de influir en las emociones, pensamientos y conductas, produce un desgaste en el organismo que se manifiesta con diferentes enfermedades.

Entendiendo las reacciones

Cuando el cerebro identifica una situación de alarma, envía señales para liberar dos hormonas: la adrenalina y el cortisol. Éstas aumentan la frecuencia cardiaca y respiratoria para estar alerta, dilatan las pupilas para mejorar la visión y estimulan al hígado para llenar al cuerpo de energía.



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Una vez superado el estrés, el equilibrio regresa. Pero, ante desafíos constantes, el cuerpo no puede recuperarse, lo que agota sus reservas y debilita sus defensas.

El estómago siente

Aunque el estrés no tiene el mismo efecto en todos, es muy común que en la mayoría provoque problemas estomacales e intestinales que incluso desencadenen padecimientos crónicos.

Acidez estomacal
 
Provoca alteraciones de la flora intestinal, que pueden causar infecciones estomacales o agravar enfermedades como la de Crohn (padecimiento inflamatorio que afecta los intestinos).

Indigestión

 

Produce que el estómago se vacíe más lento y causa incomodidad, ardor en la parte superior del abdomen, acidez e inflamación. En algunas ocasiones náuseas y vómito.

Aumento del apetito Incrementa el riesgo de padecer obesidad, diabetes o enfermedades cardiovasculares.

Gastritis por estrés Inflama y debilita el revestimiento del estómago. Cuando es severa puede causar úlceras y sangrados.
Síndrome de Colon Irritable

Afecta a los nervios que controlan los músculos del intestino provocando que no funcionen adecuadamente. Produce cólicos, gases, distensión abdominal, diarrea y estreñimiento.

 

Cuenta hasta diez

  • Fija expectativas realistas. No siempre te rendirá el día como esperas. Mejor organiza tu tiempo. Haz una lista y decide cuáles son tus prioridades. No rebases tus límites. Aprende a decir «no» cuando sea necesario.
  • Descansa de tus preocupaciones. No importa qué tan ocupada estés, reserva aunque sea uno 15 minutos del día para ti. Puedes buscar actividades para relajarte como el yoga, la meditación o el masaje terapéutico.
  • Mantente en movimiento. Las endorfinas que produce la actividad física alivian el estrés, mejoran el estado de ánimo y disminuyen la tensión muscular. Empieza un programa de ejercicio de 20 minutos tres veces por semana.
  • Lo que comes cuenta. Ya que el estrés aumenta el apetito, trata de obtener energía de frutas y verduras. Elimina alimentos que produzcan acidez estomacal como el café, el alcohol, las comidas picantes y los chocolates.
  • Defiende a tu estómago. Para disminuir los efectos negativos del estrés en el estómago incluye en tu dieta y en la de tu familia el consumo de probióticos. Estas bacterias ayudan a restaurar el equilibrio de la flora, absorber nutrientes y protegerte de enfermedades.

Este documento fue creado con la información científica disponible al momento de su edición. Puede no concordar con estudios posteriores. Se recomienda consultar a un médico. Este contenido es informativo y no pretende sustituir la receta médica. La comunicación presentada es responsabilidad del autor y no refleja la opinión del patrocinador.

 

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