Terminas de amamantarlo, lo acomodas para sacarle el aire y en eso expulsa un poco de leche, ¡no te preocupes! Le pasa a la mayoría de los bebés mientras su sistema digestivo va madurando, no afecta su crecimiento y la lactancia puede continuarse sin problema. Lo normal es que después de su primer cumple no le pase más, pero podría ser una enfermedad si:
- Vomita antes y después de comer
- Tiene cólicos y llora mucho
- Notas su garganta irritada
- Tiene problemas para respirar
- Se niega a comer
- Crece poco y no sube de peso
Esto pasa porque su esfínter esofágico (que es como la compuerta de su estómago) no cierra bien después de comer, por lo que el alimento se regresa y se sale. A este padecimiento se le conoce como reflujo gastroesofágico y requerirá de un tratamiento médico. Tu bebé siente lo mismo que un adulto con acidez, ¡imagínate!
[relacionado id=2678]
8 soluciones
La mayoría de los niños supera este episodio sin complicaciones a futuro. De todas maneras llévalo con el pediatra para que le realice exámenes físicos y pruebas de laboratorio. Para aliviar los síntomas:
- Dale menos alimento pero más tomas al día
- Al amamantarlo procura que su cabeza quede un poco elevada
- Sácale el aire antes de pasarlo al otro pecho o después de tomar 1 o 2 onzas en biberón
- Después de que coma enderézalo a 90º para que permanezca erguido por 20 o 30 minutos
- Si le das leche de fórmula, pregunta al doctor por una antirreflujo
- Compra biberones y tetinas anticólicos
- Si ya come papillas, hazlas un poco más espesas para impedir que regresen al esófago
- Sigue al pie de la letra los horarios de las medicinas para no alterar su digestión o el pH
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.