Antes de que corras ante el primer grito o sonido que emita y cambiarle el pañal, ofrecerle de comer, arrullarlo, jugar con él… Lo ideal es que lo observes detenidamente. Quizá esto te resulte difícil, en especial si es tu primer hijo, pero recuerda que es mejor mantener la calma. Tu bebé es muy receptivo a lo que sientes y puedes alterarlo más.
¿Por qué es importante entender su llanto?
Cada bebé desde que nace cuenta con la habilidad de expresar lo que quiere emitiendo distintos llantos. Si no aprendes a diferenciarlos y con frecuencia le ofreces lo mismo para tranquilizarlo, lo único que ocasionarás es que tu bebé se rinda y piense “No importa la manera que llore, siempre es lo mismo”. Su llanto será siempre igual.
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¿Qué debo hacer?
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
- Detente un momento. Cuando escuches llorar a tu bebé respira hondo 3 veces para relajarte y observarlo durante 3 o 5 minutos
- Toma en cuenta el contexto. Los bebés son susceptibles a su entorno, tienen sus 5 sentidos al máximo. Por eso es importante que te preguntes ¿qué estaba ocurriendo en casa cuando empezó a llorar?: ¿ladró el perro?, ¿había mucho ruido en la calle?, ¿la habitación en la que se encuentra tiene un aroma desagradable o hay corrientes de aíre?, ¿a qué hora fue la última vez que le cambiaste el pañal?
- Si lo dejaste con alguien más averigua si jugo demasiado con él, puede ser que esté demasiado estimulado y no encuentre la manera de conciliar el sueño
- Analízate. Los bebés absorben las emociones de sus padres, especialmente el de la mamá. Si te sientes cansada, angustiada o estresada, esto también puede ocasionar irritabilidad en tu hijo. Es importante que te relajes para poder atenderlo.
Una vez que sepas identificar el llanto de tu bebé, es importante que también tomes en cuenta su lenguaje corporal.
