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No te tortures si tu hijo tiene sobrepeso

El sobrepeso puede ser signo de estrés o depresión porque algunos niños comen para controlar sus emociones. Si es su caso, pide ayuda profesional.

Es preocupante escuchar que México es el país con mayor índice de obesidad infantil. Sin embargo, enfrentar el problema en casa lo es más porque la salud de tu hijo siempre ha sido tu prioridad. Tranquila, ¡no te tortures!

Si su peso excede el adecuado para su edad y talla, evita la culpa y concéntrate en la forma de ayudarlo pues tú eres parte importante de la solución.

Recuerda que el sobrepeso no sólo está relacionado con la alimentación, sino también con los hábitos y el estilo de vida. Para acabar con el problema, debes poner atención a los tres parámetros. Indúcelo a tomar conciencia sobre su salud y la importancia de cuidar su cuerpo. Para empezar:

  • Prefiere alimentos nutritivos. Revisa lo que hay en casa y sustituye lo necesario por comida baja en azúcar, sal y grasas. Opta por los alimentos al vapor, a la parrilla o al horno. No hagas excepciones, toda la familia debe participar
  • Modifica costumbres. Asegura un horario regular para comer, pidiéndole que lo haga despacio y sin excederse. Cuida el tamaño de las porciones y no lo obligues a que termine todo. Disminuye las visitas a los restaurantes
  • Trabajen en equipo. Sugiere una actividad en la que todos participen; véanlo como una oportunidad para convivir y conocerse mejor. ¿Qué tal salir a caminar, patinar o dar un paseo en bici? un paseo en bicicleta, salir a caminar o patinar?
  • Dale recompensas activas. En lugar de premiarlo con videojuegos, pizzas o hamburguesas, llévalo a jugar boliche, al parque o regálale algo que fomente la actividad física. Enséñale el lado divertido de estar en movimiento
  • Sé constante. Al principio quizá debas intentar una y otra vez hasta que acepte las comidas nuevas. No te des por vencida, pues es parte del proceso
  • Evita comentarios negativos. Demuéstrale cuánto lo quieres sin importar su apariencia. Lo que piensas de él influye mucho en su autoestima
  • No te obsesiones. Pesarlo todos los días o revisar las calorías de cada bocado podría estresarlo y provocar algún problema psicológico. Ve paso a paso y espera resultados en tiempos reales. Asesórate con su pediatra y un nutriólogo

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En la medida en la que te vea adquirir una vida sana y activa, podrás fomentarle buenos hábitos de manera natural. Si nota que él es el único que lleva un régimen saludable, puede sentirse en desventaja y hasta enojarse.



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