La piel de tu bebé es de un 40 a 60% más frágil y delicada que la tuya. En esta etapa todavía no desarrolla por completo sus mecanismos de defensa porque las glándulas sebáceas que tiene aun no son las suficientes y por lo tanto, su sistema inmune es inmaduro.
Durante este tiempo los niños están propensos a contraer enfermedades de la piel tipo infecciosas o inflamatorias, debido a que no producen la grasa necesaria para mantener hidratada y protegida su piel. Por eso es importante que tomes algunas medidas para cuidarlo:
• Evita bañarlo todos los días, con dos o tres veces por semana está bien
• La hora del baño debe durar menos de 15 minutos, así evitarás que se reseque la piel
• Utiliza productos diseñados especialmente para bebés
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• Si vas a poner loción, que sea sólo sobre la ropa
• Manten una higiene adecuada en la zona del pañal
• Protégelo del sol: usa bloqueador y sombrero o gorra
