Una forma de estimular la creatividad innata de tus hijos es proporcionándoles herramientas y un ambiente apropiado en el cual se sientan seguros y al mismo tiempo los motive a dejar salir todo su potencial a través de la imaginación. Color, forma y textura son tres conceptos básicos que te ayudarán a lograrlo.
Color
Existen muchos estudios que hablan acerca de los efectos terapéuticos y psicológicos que los distintos colores tienen sobre las personas dependiendo del uso que se les dé, por lo mismo, es importante que dentro de su habitación distingas 3 espacios fundamentales al momento de elegir la decoración: área de estudio, área de juegos y área de descanso.
- En el área de estudio los colores que pueden funcionar perfectamente son los de tonalidades marrones y blanco, los primeros están relacionados al confort y el trabajo diario, mientras que el segundo da una sensación de paz y luminosidad ideal para realizar las tareas de la escuela
- Para el área de juego puedes utilizar colores vivos como el rojo (un color dinámico que sugiere acción), naranja (luminoso y propio de la juventud) y el amarillo (color vibrante y jovial relacionado a la amistad)
- En el área de descanso es preferible usar colores como el azul (el color de los sueños, la relajación y la calma) y el verde (color que ayuda al reposo y que se asocia a la naturaleza).
Formas
- Los elementos que se encuentran dentro de la habitación de los niños son muy importantes, desde los muebles hasta los cojines y almohadas. Formas sugestivas tienen un impacto positivo para despertar su curiosidad y creatividad
- Al momento de decorar su habitación, debes tomar en cuenta que las formas lineales y predecibles pueden verse armónicas con el resto de la casa, pero si deseas crear un ambiente estimulante. Permite que tu hijo escoja aquellos elementos que más despierten su interés
Texturas
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La experiencia sensorial es parte importante en nuestro día a día, y en los niños esta experiencia resulta aún más relevante si consideramos que en los primeros años de vida el tacto es importante para entender el entorno que nos rodea. Es por esto que enriquecer la experiencia de tus hijos por medio de distintas texturas al momento de jugar o a la hora de dormir, es una excelente forma de introducir en su mente conceptos como liso, suave, duro, arrugado, etc., con lo cual no sólo permites que agreguen estos conceptos a su vocabulario, sino que al mismo tiempo les permites explorar y jugar con ellos.
Si deseas transformar la habitación de tus hijos en un espacio agradable y lleno de estímulos puedes visitar Pottery Barn Kids, donde podrás encontrar distintos muebles y productos únicos con diseños pensados especialmente para que desarrollen su imaginación y todo su potencial creativo.
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